Ingredientes para 4 porciones:
1 cabeza de coliflor grande
2 cucharadas de arrurruz en polvo o maicena
2-3 cucharadas de agua
1/2 taza de aminoácidos de coco, aminoácidos líquidos de Braggs o salsa de soja baja en sodio
1/4 taza de jarabe de arce puro o miel cruda
1/4 taza de vinagre de arroz
1 cucharadita de ajo en polvo
2 cucharadas de aceite de sésamo tostado, cantidad dividida
1 cucharadita de jengibre en polvo
1/2 cucharadita de pimienta de cayena
Guarnación:
1 cucharada de semillas de sésamo
Procedimiento:
- Precalienta tu horno a 260 grados c. y cubre una bandeja para hornear grande con papel encerado.
- Rocía con una cucharada de aceite de sésamo y úntalo sobre toda la superficie de la bandeja para hornear.
- Corta la coliflor en trozos y extiéndalos en la bandeja para hornear preparada (me gusta cortarlos un poco más grandes ya que seguirán rompiéndose mientras los revuelvo).
- Asa en tu horno precalentado durante 15 minutos.
- Mientras tanto, en un tazón mediano bate la maicena con 2-3 cucharadas de agua hasta que esté completamente suave.
- Agrega todos los ingredientes restantes, excepto las semillas de sésamo, y bate hasta que todo esté bien combinado.
- Una vez que los floretes lleven 15 minutos de horneado, retírelos con cuidado del horno.
- Vierte la salsa pegajosa sobre la coliflor y revuelve para cubrirla, luego colócalas uniformemente sin superponerse.
- Continúa horneando durante 10 a 12 minutos o hasta que esté dorado y pegajoso. Es posible que desees revolverlos nuevamente a la mitad del tiempo de horneado para cubrirlos con la salsa.
- Espolvorea con semillas de sésamo. ¡Disfrútalos mientras estén calientes!